Ricardo Mur: “Creo que es un momento perfecto en mi vida para cambiar de aire”


Desde el próximo lunes, Ricardo Mur, se sumará al plantel de periodistas de Noticiero 7.
Todo surgió hace una semana, cuando saltó la noticia de que una de las caras de mayor experiencia y más popularidad de Canal 9 se bajaba del colectivo madrugador para dar paso a un nuevo desafío. La noticia comenzó a volar como aves emigrando a lugares cálidos y finalmente, el periodista Ricardo Mur habló con La platea sobre la buena nueva. “Voy a seguir en el mismo ámbito, siempre ligado a lo periodístico. Y desde el lunes 9 me incorporo al grupo de Noticiero 7”, sostuvo quien lleva 25 años junto a los mendocinos y la noticia.

—¿Qué sentís en este momento?

—Estuve 25 años ininterrumpidos en la pantalla y al momento de evaluar a nivel familiar, pesaron muchas cosas. Creo que es un momento perfecto en mi vida para cambiar de aire. Es todo un desafío. Fueron 25 años de experiencia muy valiosa para mí. Debo agradecer la posibilidad que se me dio, de aparecer por un imprevisto, ya que no había quién supliera a los dos conductores que estaban en su momento, allá por 1984. No había quién sacara al aire esa noche el noticiero. Me preguntaron y caraduramente respondí que me animaba a conducirlo. Y ese sí se prolongó durante 25 años.

—Si tuvieras que elegir lo mejor que te pasó en tu vida profesional, ¿que sería?

—Lo que he logrado en estos 25 años es un hermoso reconocimiento de la gente. Para mí es uno de los tesoros más valiosos.

—¿Sos consciente de la repercusión en la calle, en Internet, Facebook, blogs del traspaso a Canal 7?

—En realidad, ni el Facebook ni el blog Ricardo Mur son míos y hace mucho que no los veo.

—En el blog se ha generado una encuesta sobre en qué canal tendrías que trabajar, algunos se animan a votar que en Playboy, y te han dejado en Facebook miles de mensajes...

—(Una gran carcajada) ¿En serio? Internet es impresionante.

—¿Y cómo te llevas con la red de redes?

—Y, obligatoriamente, me tengo que llevar bien. Un día terminé mi jornada con una máquina de escribir Olivetti y al día siguiente, me encontré con un teclado, una pantalla y un CPU y dije: ¡Bueno... me tengo que ir del canal! En ese momento había gente joven haciendo sus primeras armas en la profesión, entre ellos Antonio Ginart, con quien intercambiamos experiencia por conocimiento. Hoy no podría vivir sin un teclado.

—¿Por qué creés que la gente te sigue?

—Porque mi estilo coincide con el común denominador de la gente. Es como si fuera un integrante más de la familia, que no llega a fin de mes con el sueldo, los remedios, el frío, el calor, los chicos que se levantan con pocas ganas de ir a la escuela... hay una especie de diálogo con la gente. Creo que desacartoné un poco los noticieros y eso a la gente le cayó bien.

—¿Cuándo te decidiste por el periodismo?

—En 4º año de la secundaria me decidí por las letras y estaba entre el profesorado de historia y geografía, el periodismo y ser piloto. ¡Por mis problemas visuales, cuando me vieron con lentes me dijeron: siga de largo!

—¿Con tu experiencia, qué les decís a los chicos que recién empiezan?

—Lo único que les digo es que esta es una profesión que no acepta medias tintas. Se ama o se odia. Te exige demasiado y no disponés de tus tiempos. Yo, por ejemplo, me perdí el crecimiento de mi dos primeros hijos, de sus primeras palabras, sus primeros pasos. Incluso llegué cuando ya habían nacido. Con mi hija menor dije ‘no’. Asistí al parto, le di su primer baño y hoy con ella tengo una relación muy especial fruto de esto.

—¿Alguno sigue tus pasos?

—¡Por suerte no! De las muchas exigencias que supone, y seamos realistas, no es una profesión al menos en el interior del país, redituable, económicamente hablando.

—¿Hace cuánto estás casado?

—Treinta años. Mi esposa se casó sabiendo que yo era un periodista, pero lo que nunca imaginó es que iba a llegar a la TV y a ser tan popular.

—¿Cómo imaginás el periodismo en los próximos 10 años?

—Con periodistas, no con máquinas. Creo que va a seguir siendo uno de los baluartes que tiene el pueblo y una herramienta que observa que las cosas se hagan como tienen que ser.

—¿Qué opinión te merece el actual Gobierno nacional?

—Desde mi punto de vista, no es lo que muchos argentinos votaron o pensaron. Creo que están manejando el poder con mucha altanería y soberbia, con intereses muy mezquinos y creo que esa mezcla no le hace nada bien a la República.

—¿Y localmente?

—La soberbia aquí no cabe. Sí me preocupa que todavía no han entendido lo que el pueblo quiso decir el pasado 18 de julio. Hay una especie de sordera. Me parece que ya ha pasado mucho tiempo de reflexión. /N.M


Desde el próximo lunes, por Canal 7

Cortitas de Ricardo Mur

“La gran incógnita es si cambia la audiencia o no, y yo no sabría responderlo. A esta altura de mi vida es un desafío muy interesante.”

“Ya tengo hijos, planté un árbol. Escribir un libro no me llama la atención... Solo me queda pilotear un avión.”